Servicio de Prótesis Bucal
Las Prótesis Fijas, Prótesis Removibles permiten sustituir a los dientes y otras estructuras orales, con el restablecimiento de las funciones estéticas, fonéticas y masticatorias.
Tienes 4 fases que debes pasar, con el que te garantizamos un excelente servicio.
Fase 1
Se toma una impresión (huella) de tu boca y se envía al laboratorio protésico.
Fase 2
El odontólogo coloca unas bases con unos rodetes de cera en tu boca. A continuación realizará una serie de mediciones y modificaciones sobre la altura y forma de la cera para adecuarla a tu sonrisa, tu perfil y tu estructura facial.
Fase 3
El laboratorio protésico hace entrega de la futura prótesis con los dientes montados en cera. En esta fase el odontólogo comprueba que la forma, tamaño y color de tus dientes es el adecuado tanto desde la función como desde la estética. Tras comprobar estos puntos se vuelve a enviar al laboratorio para su acabado.
Fase 4
El laboratorio envía la prótesis ya acabada y el odontólogo la coloca en tu boca y comprueba que la oclusión, el ajuste y la estabilidad, así como la estética son correctos. A continuación te dará pautas sobre el correcto mantenimiento de la prótesis y su higiene. Además, se programan las citas de revisión.



Estas fases se ejecutan en diferentes citas.
Lo más frecuente, especialmente en personas de edad avanzada, es que se utilicen con este fin prótesis removibles, las conocidas como dentaduras postizas, que durante el día permiten devolver la normalidad a una boca sin dientes en las funciones de masticación, estética y habla; y que por la noche se extraen de la boca para facilitar su limpieza.
Esta prótesis dental se diseña y construye a medida de las características y necesidades físicas de cada persona, ya que debe adaptarse perfectamente a los tejidos y la forma de los maxilares en los que se apoya, de modo que no pueda moverse o despegarse de la encía.
La utilización de las prótesis removibles requiere un periodo de adaptación a la misma por parte del paciente, además de educarle en la asunción de la responsabilidad en su cuidado y limpieza diaria.
La prótesis dental fija es un tipo de prótesis dental que se apoya sobre los dientes sanos que el paciente aún conserva en su boca. Normalmente, las prótesis parciales fijas (como también se les denomina) sustituyen a dientes perdidos adyacentes: que se encontraban juntos en la boca del paciente. Junto con los implantes dentales, estas prótesis parciales fijas son la mejor solución para las personas que han perdido uno o varios dientes naturales.
Además de las ventajas más obvias, como la recuperación de la función masticatoria y el restablecimiento de la estética de su sonrisa, un puente dental (nombre que también recibe este tipo de prótesis) evita diversos riesgos para la salud bucodental del paciente. Cuando hay ausencias dientes en la boca del paciente, las piezas que rodean al hueco vacío tienden a girar o moverse para ocuparlo con el paso del tiempo. Esto ocasiona en los pacientes problemas de mordida, bruxismo y un mayor riesgo de caries y enfermedad periodontal.
Funcionalidad: recuperan la funcionalidad de la dentición.
Estética: recuperan la estética dental.
Hechas a medida: se adaptan a la forma de los maxilares.
Higiene: fáciles de mantener y limpiar
Flexibilidad: perfecta solución cuando el hueso o condiciones del paciente no permiten implantes.
Sustitución de piezas: cementándose a los dientes adyacentes de manera que no pueden ser sustraídas por el paciente.
Fácil adaptación: total recuperación de función y estética de manera cómoda para el paciente.
Evita malposiciones: evita que el resto de dientes se malposicionen debido a las ausencias.